En estas fechas, siempre celebramos en casa la Pascua Ortodoxa y pintamos los huevos de colores, sentados alrededor de la mesa, con los materiales que tenemos a mano. Como en estos día se lleva a cabo una cuarentena en España y muchos otros países, hemos tenido que improvisar…
Entre otras cosas, no econtrábamos huevos blancos por ningún lado, ni tampoco pigmentos especiales de alimentación para pintar nuestros huevos. Así que decidimos hacer un tinte de cebolla natural y dibujar encima con rotuladores que no penetran la cáscara…
Fue una sorpresa muy agradable ver el resultado! Nos salieron tan bonitos y “artísticos” que pensé que valía la pena hacerles unas fotos simpáticas compratirlos en el Blog.